Junkrat
Junkrat es un demoledor fanático de los explosivos que disfruta con el caos y la destrucción.
Daño
Junkertown, Australia (anteriormente)
29 feb (Edad: 27)
Habilidades
Lanzagranadas
Arma de proyectiles explosivos que rebotan.
Mina de conmoción
Lanzas una mina que repele con MAYÚS IZQ y la detonas con HABILIDAD 1.
Cepo
Colocas una trampa inmovilizadora.
Rueda explosiva
Diriges y detonas una rueda explosiva.
Caos total
No sufres daño de tus propios explosivos. Sueltas bombas al morir.
Las teclas predeterminadas de PC que aparecen a continuación se pueden configurar en el juego.
Historia
Junkrat creció en el páramo irradiado que rodea a Junkertown y es una persona inestable con una extraña obsesión por los artefactos explosivos. Es uno de los «Chatarreros» anárquicos del desierto y, junto con su compañero y guardaespaldas Roadhog, vive por y para el crimen y el caos.
La ofensiva contra el núcleo de fusión del ómnium australiano alteró para siempre el aspecto del desierto. Tras la detonación, la zona se transformó en un páramo irradiado y hostil, plagado de escombros y fragmentos retorcidos de las desvencijadas instalaciones; un lugar inhabitable para la mayoría.
Pero algunos sobrevivieron y se autodenominaron «Chatarreros». Se encargaban de saquear los restos del ómnium y de conformar una sociedad vil en las sombras. Junkrat era uno de estos supervivientes que se revolvían entre componentes y piezas de metal de las ruinas. Como muchos otros, se había visto afectado por la radiación latente. Esta pincelada de locura le permitió manejar explosivos peligrosos con soltura, una pasión que no tardó en convertirse en obsesión.
Ganó cierta notoriedad al descubrir un secreto de gran valor en el corazón del ómnium. Pese a que no muchos conocían la naturaleza de lo que había descubierto, cazarrecompensas, bandas y oportunistas lo perseguían allá adonde iba hasta que llegó a un acuerdo con el sicario Chatarrero Roadhog, que aceptó a regañadientes ser su guardaespaldas a cambio de la mitad del botín. Tras una serie de ofensas contra Junker Queen, Junkrat y Roadhog fueron exiliados de Junkertown. Cuando dejaron atrás el desierto, decidieron embarcarse en una aventura de actividad criminal por todo el mundo, dejando un reguero de caos y trifulcas a su paso. «No te harás rico si no te creen ladrón y asesino». Pese a que pidieron una recompensa importante por sus cabezas, todavía nadie ha conseguido capturarlos, pues usan los mismos métodos que les han hecho ganarse la vitola de «se busca»: ¡más y más cargamentos de bombas!